CREMA FACIAL CON EXTRACTO DE ALGAS PARA LA PIEL MADURA

Quedó una crema muy rica con la cera emulsionante nº 3. Con una textura cremosa tipo mousse muy fresca y suave, de fácil penetración en la piel, sin sensación grasa.

Crema hidratante, reafirmante y regenerante  gracias los activos de las algas.Para pieles maduras y sensibles.

Ingredientes:
Fase acuosa
42 gr agua de azahar
6 gr extracto HG de algas marinas casero

Fase oleosa
6 gr macerado de flor de azahar en aceite de sésamo
4 gr macerado de cola de caballo en aceite de nuez
3 gr macerado de incienso en aceite de onagra
4 gr cera emulsionante nº 3 casera

Aditivos
Aceite esencial de geranio
Vitamina E (antioxidante)
0,6% extracto de semilla de pomelo (conservante)
pH corregido con una solución de ácido cítrico


Con extracto hidroglicerinado de algas marinas: sus activos restauran la vitalidad y la capacidad para la división de las células madre en la dermis, estimula la producción de fibroblastos y favorece la síntesis de colágeno de la piel madura. Tensa la piel y rellena las arrugas.
Las algas son una excelente fuente de nutrientes y minerales con alta afinidad con las células de la piel. Nutren y estimulan las células vivas y promueven la renovación de la piel. Para aumentar el efecto hidratante  de los cosméticos, añadimos moléculas que retienen el agua y lo entregan a la piel. Se utilizan para proporcionar suavidad y tersura a los preparados cosméticos. Hidratan, tonifican, reparan  y protegen la piel. Ayudan a luchar contra la generación de radicales libres implicados en el envejecimiento de la piel. 

Podemos decir que las algas son hidratantes, reafirmantes y regeneradoras, son estimulantes del metabolismo, aumentando el intercambio celular y mejorando la eliminación de toxinas, dada la presencia de antioxidantes (vitaminas y oligoelementos). 

Para saber más sobre las propiedades de las algas, aquí.

He macerado en aceite de sésamo, flor de azahar, flor que tiene efectos pronunciados en la piel. Es hidratante, calmante y tonificante. Se la considera muy útil en casos de piel enrojecida y adecuada en casos de piel seca. Actúa directamente en el tejido celular cutáneo, estimulando la regeneración de las células y formación de colágeno, previniendo en envejecimiento celular. Para todo tipo de piel, normal, mixta y especialmente para pieles maduras, deshidratadas y sensibles. Este macerado además de tener buenas propiedades, huele de maravilla!
El aceite de sésamo, absorbe los rayos ultravioletas,  es excelente  hidratante para  la piel por su contenido en aceites grasos omega 6 y minerales como el calcio y el zinc. Aumenta la regeneración de los tejidos.

Como hacer macerados en aceite vegetal, aquí    

Cola de caballo: con propiedades regeneradoras, anti-edad, reafirmantes y anti-arrugas. Efecto lifting. Activa la renovación celular, estimula la producción de colágeno por las células, y reestructura la elastina, reduciendo la profundidad de las arrugas.

Hierba macerada en aceite de nuez, aceite que tiene altas propiedades tonificantes, nutritivas y antioxidantes, que evitan el envejecimiento  y ayudan a proteger las pieles sensibles, escamadas y secas. Con vitaminas A, B, D y E. Aceite que corrige arrugas y protege de los rayos ultravioleta.

El incienso es útil para el cuidado de la piel. Ideal para pieles maduras ya que tiene cualidades tonificantes y rejuvenecedoras. Es anti-inflamatorio, antiséptico, tónico, calmante y cicatrizante. Ayuda a tratar las pieles inflamadas y a suavizar las arrugas
El aceite de onagra es rico en fitoesteroles y vitamina E. Tradicionalmente en productos para la piel madura, es un anti-arrugas excepcional. Calma las pieles irritadas, sensibles, picazón y enrojecimiento. Anti-inflamatorio natural, reestructura las fibras de colágeno y defiende la piel de agresiones medioambientales.

El aceite esencial de geranio es excelente para la piel. Puede ser eficaz como regenerador celular para la piel madura, para la prevención y tratamiento de las arrugas. Agregado a cremas es un buen equilibrador en casos de acné, pieles secas o seniles. 

Esterilizar antes los utensilios que utilicemos en la preparación, y también los tarros donde envasemos (hervir al baño-maría o limpiarlos con alcohol y dejarles secar al aire), para que no se contamine la preparación y se conserve en buenas condiciones.